Carta para Daesh

Señores del autoproclamado Califato Islámico de Irak y Levante, asesinos de inocentes, violadores de derechos humanos, posiblemente esta carta nunca la recibáis o nunca llegue a alguno de vuestros secuaces, pero mi objetivo es ese, e Internet hace maravillas. Me he repasado el Corán. Sí tengo un Corán, y el mio sí ha tocado el suelo. En dichos versículos he encontrado multitud de frases machistas y vejatorias, pero ninguna alusión de matar a los infieles, no hay nada al respecto. Os recomiendo que lo leáis, porque estoy seguro de que la mayoría de vosotros no lo habéis hecho. En 2014 dabais un plazo de 5 años para conquistar Al-Ándalus, España. ¿De verdad creéis que vais a llegar hasta aquí? ¿De verdad creéis que conquistaréis el mundo entero? Es una utopía lo que tenéis. Sois mentes entre lo infantil y la demencia. El reloj de vuestras vidas se está acabando, la luz de vuestra hegemonía se apaga. Habéis conseguido unir al mundo. Habéis conseguido poner al mundo en vuestra contra, incluso a los vuestros. Trabajáis para el miedo, un miedo que no lográis implantar, un miedo que pocos temen. Trabajáis contra la libertad, una libertad que jamás conseguiréis erradicar. Liberaremos a los pueblos que tenéis retenidos en Siria, Irak y Libia. No hay nada más fuerte que el pueblo, un pueblo que se os levantará, porque lo hará. No sois ISIS, soy Daesh, sois las ratas. Unas ratas que huyen de las mujeres valientes que se os enfrentan. Unas ratas que se creen que por matar a nuestros amigos nos vamos a acongojar. Sois una plaga, sois un virus. Nuestras vacunas son la libertad y la educación. Vivís en la Edad Media, pero cuanto más daño intentéis hacernos más os devolveremos a la Edad de Piedra. Para mi humanos no sois, sois una especie que se ha quedado en el siglo V. Tenéis los días y las noches contadas.

Siempre me despido con un "hasta luego", pero como no pretendo que volváis a respirar en la vida, me iré con un adiós.

Atentamente,

Sergio García, vuestro enemigo sin miedo.