martes, 5 de diciembre de 2017

Puertas a la red



En el mundo hay pocos lugares en los que no exista un dominio monopolístico o estatal directo, pero uno de estos lugares donde no existe tal dominio está muy presente en nuestras vidas: Internet. La red es un mundo digital descentralizado donde satisfactoriamente millones de personas pueden expresarse libremente. En los últimos años, y gracias a las redes sociales, Internet se ha convertido en el mayor y mejor medio de comunicación de masas sin filtros del mundo. Y esto molesta. Molesta al sistema conservador actual. Molesta a las grandes élites. Molesta a los gobiernos que se ven imposibilitados al control comunicacional como lo han llevado a cabo durante años con los medios de comunicación convencionales.

Las redes sociales han permitido una comunicación fluida y directa, donde es cierto que no está libre de bulos, pero donde la censura no tiene sitio. La inexistencia de esta barrera permite que salgan a la luz noticias e informaciones que las altas élites políticas y económicas querrían evitar. Del mismo modo, medios y páginas webs como WikiLeaks y grupos como Anonymous han permitido distribuir una información libre sobre los mayores escándalos de la historia. Desde casos de corrupción hasta asesinatos intencionados de civiles en Oriente Medio. Así mismo, Internet y las redes sociales han permitido el surgimiento de movimientos y partidos políticos que incomodan al sistema establecido, como es el caso de Podemos en España.

En estos últimos días se ha dado la noticia de que el Gobierno español, dirigido por el Partido Popular, pretende eliminar el anonimato en las redes sociales. A mí no me afecta, pero va en contra de la libertad y de los derechos de los usuarios de Internet y de las redes sociales. Es un ataque contra la libertad. Un ataque que justifican como respuesta al peligro que ejerce la desinformación en la Seguridad Nacional. El gobierno que tiene la televisión pública más manipulada de Europa; el gobierno que envía a un "periodista" condenado al Senado, con pruebas tildadas como falsas por la justicia y por el Tribunal Supremo, para atacar sin prueba real alguna a la oposición; el gobierno del partido de las mentiras del 11-M, del Prestige y del Yak-42; el gobierno cuyo partido está condenado por financiación ilegal; el gobierno cuyo partido está imputado por destrucción de pruebas. Este mismo gobierno habla de desinformación.

El problema de la Seguridad Nacional, o más bien el problema del PP, no es la desinformación — que tanto favorecen ellos , sino la información, la verdad. El Partido Popular pretende poner puertas a Internet. Pero no es la primera vez que lo intentan, y me temo que tampoco será la última. Pretenden combatir la desinformación usando como expertos a periodistas afines a su partido y a periodistas condenados por difamaciones y mentiras. Parece una broma, pero no lo es.

El Partido Popular tiene un problema con la información. A la verdad la llaman desinformación, a las pruebas tildadas como falsas por la justicia las llaman pruebas incuestionables. Así como a las pruebas absurdas, ya que recuerdo que la única prueba para demostrar la supuesta financiación ilegal de Podemos en el Senado ha sido un mapa de España con la fotografía de Pablo Iglesias. Esa es la única prueba que se ha presentado. Podemos es una herramienta que surgió gracias, en gran medida, a Internet. Es una herramienta que pretende quitar el poder a esta élite conservadora para devolvérselo a la democracia, y eso incomoda hasta tal punto que pretenden inventarse conspiraciones y sucesos ficticios y absurdos con tal de que todo siga igual. Con tal de que sigamos siendo unos borregos a través de los que se lucran. La libre distribución de información incomoda al sistema.

No obstante, todas estas campañas contra Internet, con el objetivo de reducir los derechos y las libertades, no me preocupan. Pretender poner puertas a Internet demuestra la ignorancia digital de esta gente. Demuestra la mentalidad conservadora y antigua que no les deja ver más allá. Creen que el mundo no ha cambiado, que todo sigue igual y que seguimos siendo ovejas a las que pueden utilizar. No se dan cuenta de que el mundo ya no es como ellos querrían, de que el control que antes podían ejercer ya no les será tan fácil ejercerlo, y de que tanto en el mundo digital como en el físico la gente comienza a despertar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario